Por Patricia, directora
Las actividades extraescolares de este tipo requieren de un entrenamiento en el que los niños y las niñas aprendan cómo resolver situaciones que se presentan fuera del contexto del hogar y de la escuela, especialmente en un ambiente natural.
Uno de los objetivos de los campamentos es proporcionarles herramientas adecuadas para disfrutar de manera creativa, positiva y responsable el lugar que se visita.
Las actividades que se programan para los campamentos ubican a nuestros niños ante retos que les permiten conocerse, reconocer sus miedos, obtener confianza, aprender a cuidar de sí mismos y, sobre todo, forjar su carácter. La capacidad de observación que van desarrollando así como su curiosidad natural son herramientas esenciales para aprender y valorar las relaciones de colaboración que se establecen necesariamente con los compañeros y con el entorno natural.
Definitivamente es una experiencia enriquecedora para todos: padres, alumnos y maestras.